San Telmo es uno de los barrios más populares de Buenos Aires que está rodeado de mercados de tango y artesanía, así como de algunos de los mejores restaurantes de la ciudad. También está a pocos minutos de famosas atracciones como La Boca, hogar de las coloridas casas hechas de metal corrugado. Y está cerca de Puerto Madero, con sus parques y muelles para dar hermosos paseos a pie o en bicicleta, también hay algunos parques muy agradables donde puede llevar a sus hijos a pasear o disfrutar de un almuerzo al aire libre con ellos.
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Ir a la Plaza Dorrego y ver el tango
La Plaza Dorrego es una de las más famosas de la ciudad, llena de historia y encanto. Está rodeada de casas de tango y restaurantes perfectos para los niños. Puedes pasar todo el día allí viendo a los bailarines ensayar en la plaza o disfrutar de una comida típica con tu familia en un restaurante local.
Es un punto de encuentro cultural imprescindible en el corazón de San Telmo. Famosa por sus innumerables restaurantes y bares, esta animada plaza también ha sido escenario de numerosos festivales de tango, así como de una tarde en familia: puedes visitar los puestos del mercado que ofrecen recuerdos artesanales todos los domingos de 11 a 20 horas y perderte en el colorido mercadillo durante el resto de la semana.
Caminar por el barrio y ver las casas
Lo mejor que se puede hacer en San Telmo es pasear por el barrio y ver las casas. Puedes optar por hacer una visita auto guiada o conseguir un guía de uno de los muchos que ofrecen recorridos por la zona. Hay una gran variedad de materiales, estilos y diseños. También verá mucho arte local realizado por algunos de los practicantes más famosos de Buenos Aires.
Ir al mercado de San Telmo y comprar souvenirs
San Telmo es el lugar perfecto para ir de compras con los niños, es una buena manera de pasar un rato junto con ellos y dejar que disfruten de la experiencia de estar en esta increíble ciudad. No se pierda la oportunidad de ver la música y la danza folclórica argentina, así como a los artesanos locales trabajando. Es un bazar al aire libre en el que se puede encontrar de todo, desde bolsos de piel hechos a mano, zapatos y joyas hasta ropa de segunda mano, libros, discos y coches de juguete antiguos.
También es un lugar estupendo para comer y pasear para ver las diferentes tiendas que hay a poca distancia. Venga aquí por la mañana temprano para comprar productos frescos, carnes, pescado y flores, o vaya por la noche para asistir a eventos de carnaval como espectáculos de tango o conciertos. Es una gran opción para visitar con niños, ya que hay todo tipo de souvenirs y artesanías disponibles, librerías y tiendas de antigüedades, un ambiente histórico y muchos lugares donde pueden jugar.
Tomar una clase de Tango
Si estás buscando ideas sobre qué hacer con los niños en San Telmo, toma una clase de tango. Se lo pasarán en grande bailando el tango con los lugareños y es la forma perfecta de conocer esta hermosa ciudad, a cualquier niño le encanta bailar, y esta es una forma de instruirlo en diferentes estilos de música y cultura argentina, ya que aprenderá los diferentes estilos de tango y cómo bailar en grupo o en pareja. Cada clase incluye canciones, actuación musical, lección privada y una reunión social posterior con refrescos.
Ir a una milonga (baile de tango)
Es un evento de baile y música argentino. Es un evento típico de San Telmo, especialmente durante las vacaciones de verano, donde hay milongas casi todos los fines de semana. Hay dos milongas (baile de tango) diferentes en San Telmo. Una de ellas se encuentra en la esquina de San Juan y Caseros, cerca del callejón del Torito, donde se puede encontrar una bonita terraza. La otra se encuentra frente al Palacio de los Leones, en la esquina de Defensa y Caseros. Si viaja con niños, no se pierda la milonga. Vístelos, llévalos a tomar un maravilloso vino argentino y un delicioso asado, y luego a la milonga.
Comer empanadas
Asegúrese de que sus hijos comen bien en Buenos Aires llevándolos a San Telmo para vivir una auténtica experiencia argentina. Las empanadas de pino y el dulce de leche son sus delicias favoritas y son una gran manera de probar algo de la cocina local, con nuestro guía local. Se trata de un lugar ideal para ir con niños por su entorno al aire libre y su fácil acceso.
Hay mucho espacio para los cochecitos y las sillas de ruedas, y el propio parque cuenta con aseos, zonas de césped y edificios históricos para explorar. Y lo que es más importante, hay muchos restaurantes cercanos que venden deliciosas empanadas.
